Las más de 70 Plataformas de padres objetores a Educación para la Ciudadanía que fueron surgiendo de manera expontánea frente a esta asignatura, han decidido agruparse como Federación Nacional con vocación de permanencia en todas las cuestiones que tengan que ver con el ámbito educativo. Por supuesto su objetivo prioritario sigue siendo EpC.
En declaraciones a cope.es Marisa Pérez Toribio, portavoz de Soria Educa en Libertad, una de las Plataformas de padres objetores, ha asegurado que hasta el momento son, como mínimo, 54.000 las objeciones a Educación para la Ciudanía presentadas en toda España pero el ministro de Educación, Ángel Gabilondo, sigue sin atender a sus reiteradas peticiones de reunión para intentar encontrar una solución definitiva al conflicto.
Los objetores a EpC denuncian, asimismo, que "de cara a la galería, el ministro Gabilondo asegura que piensa recibir a los representantes de este colectivo, sin embargo -añade Marisa Pérez Toribio- la realidad es otra".
Los padres objetores creen que su constitución en Federación Nacional les va a dar mayor solidez y su intención es que finalmente se les vea como un interlocutor frente al Ministerio. "Esperamos - asegura la portavoz de Soria Educa en Libertad- recibir una contestación del ministerio a la carta que enviamos el pasado 22 de abril en representación de los miles de objetores. Lo que pretendemos es proponer soluciones a un conflicto que dura ya demasiado tiempo".
Desde la Federación Nacional de Plataformas de Objetores a EpC piensan seguir informando a los padres sobre el contenido de esta asignatura que muchos todavía desconocen y ayudar a aquellos que decidan ejercer su derecho de objeción. Un derecho que, con toda rotundidad , acaba de reconocer el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.
"Estamos plenamente satisfechos con la sentencia -asegura Marisa Pérez-, Castilla y León respalda al cien por cien lo que desde un principio hemos dicho: EpC supone un riesgo exorbitante que los padres no tienen porque soportar".
Sabemos -continúa la portavoz de los padres objetores- que "tenemos la razón y llegaremos hasta el final", incluso si es preciso hasta el Tribunal europeo de Derechos Humanos, pero esperamos que el Ministerio de Educación lo resuelva. La solución está en su mano y no le va a quedar más remedio que recibirnos. "Lo que pretendemos es aportar soluciones a un conflicto que dura ya demasiado tiempo."
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